Vanti deberá devolver cobros a usuarios tras alza injustificada en tarifas de gas, según Superservicios
Publicado el 22 de mayo de 2025 | Fuente: El Colombiano
La Superintendencia de Servicios Públicos (Superservicios) ordenó a Vanti devolver el 100% del dinero cobrado en exceso a más de 2,5 millones de usuarios de gas natural en Bogotá y Cundinamarca, luego de que se evidenciaran incrementos injustificados en las tarifas durante diciembre de 2024 y enero de 2025.
Pese a que Vanti argumentó que los aumentos respondían al encarecimiento del gas nacional y a la incorporación de gas importado, la entidad encontró que la empresa contaba con reservas suficientes, según contratos con Ecopetrol, para cubrir la demanda sin necesidad de dichos incrementos.
Una crisis energética que golpea al país
Colombia atraviesa una crisis de gas natural derivada de la baja producción interna y la creciente dependencia de las importaciones. Los precios del gas han aumentado hasta un 475%, según denunció el presidente del Grupo Energía Bogotá, Juan Ricardo Ortega.
Ortega señaló que el gas doméstico que se vendía a 4 USD por millón de BTU, ahora se cotiza hasta en 23 USD, debido a prácticas especulativas de los productores. Además, los costos de licuar, transportar y regasificar el gas importado añaden un sobreprecio adicional de 8 USD.
La defensa de Vanti ante la resolución
En respuesta, Vanti afirmó que la resolución de la Superservicios presenta inconsistencias, alegando que la normativa vigente exige disponibilidad diaria del recurso, no solo mensual. También defendió la inclusión de clientes industriales en sus contratos regulados, argumentando que las pymes forman parte del mercado regulado.
La compañía expresó su sorpresa ante la sanción y anticipó acciones legales, asegurando que se han realizado ajustes tarifarios desde el pico de 36% alcanzado en febrero. No obstante, el caso refleja la necesidad de una discusión estructural sobre la formación de precios del gas en Colombia.
El caso Vanti saca a la luz un problema más profundo: la escasez estructural de gas en Colombia y la falta de transparencia en el mercado energético. Mientras los usuarios enfrentan tarifas elevadas, las empresas y reguladores se disputan la interpretación normativa y los verdaderos costos del suministro.
