La Comisión Quinta de la Cámara de Representantes aprobó en primer debate el proyecto de ley que busca reducir las tarifas de energía en Colombia. Con este aval, la iniciativa pasará a su segundo debate en la Plenaria de la Cámara.

De acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía, este avance abre una discusión de fondo sobre las reglas del sector eléctrico, con el propósito de aliviar la presión tarifaria sobre los hogares, fortalecer la equidad y garantizar el acceso a la energía como un derecho en todos los territorios.

“Que este proyecto pase a segundo debate es una señal clara de que el Congreso está escuchando a la gente. La energía no puede seguir siendo un factor de desigualdad; debe ser un derecho con tarifas justas, reglas claras y participación real de los territorios”, afirmó el ministro Edwin Palma Egea.

Durante el primer debate se analizaron más de 30 proposiciones, muchas de las cuales fueron incorporadas al texto que ahora será discutido en plenaria.

¿Qué propone el proyecto?

La iniciativa contempla medidas estructurales orientadas a mitigar los impactos tarifarios sobre los hogares de menores ingresos, mejorar la asignación de subsidios y eliminar cobros ajenos al consumo real en las facturas de energía.

• Reforma al sistema de subsidios con criterios técnicos y transparentes.
• Eliminación de cobros no relacionados con el consumo energético.
• Estabilización de tarifas y reducción de la volatilidad de precios.
• Tarifas diferenciales para usuarios vulnerables e industrias limpias.
• Mayor inversión en regiones con altos niveles de pobreza energética.
• Reforma a la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) con participación de usuarios, academia y sindicatos.

También se propone mitigar los impactos de la Opción Tarifaria, redistribuyendo de forma solidaria los saldos que afectaron a los estratos más vulnerables, así como crear fondos para cerrar brechas energéticas y compensar a los territorios impactados por grandes generadoras.

Postura de los gremios

Pese a los objetivos del proyecto, varios gremios del sector y expertos académicos han advertido que la iniciativa no reduciría las tarifas de energía y que, por el contrario, podría generar incrementos.

Alejandro Castañeda, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg), señaló que siete de los diez artículos del proyecto se enfocan en cambios regulatorios que no tendrían efectos inmediatos sobre las tarifas.

Según Castañeda, uno de los puntos más sensibles es la modificación en la asignación de subsidios para los estratos 1, 2 y 3, lo que podría traducirse en mayores costos para los hogares. En regiones como el Caribe, donde el consumo promedio supera los límites subsidiables, la medida podría afectar a un amplio número de usuarios.

El debate en plenaria será determinante para definir si el proyecto logra cumplir su promesa de aliviar el costo de la energía o si, como advierten los gremios, generará nuevos impactos sobre las tarifas.