 
      Foto tomada de: La FM
En el marco del Congreso de Energía y Mercado Mayorista 2025, el exministro Tomás González Estrada calificó como “un capricho del presidente Gustavo Petro” la posible venta de la participación de Ecopetrol en el yacimiento Permian, ubicado en Estados Unidos, advirtiendo que la medida carece de sustento técnico y pondría en riesgo la rentabilidad del país.
Durante su intervención, González, actual director del Centro Regional de Estudios de Energía (Cree), recordó que hasta hace un año la petrolera estatal buscaba aumentar su participación en el proyecto Permian, el cual proyectaba importantes beneficios económicos y productivos para Colombia.
“Hace un año Ecopetrol estaba pidiendo autorización para aumentar su participación en el Permian. Esa inversión iba a generar casi un 10% más de producción, un aumento de reservas y cerca de un 14% más de utilidades, más de un billón de pesos adicionales”, afirmó González.
Críticas a la decisión del Gobierno
El exministro cuestionó que el cambio de postura del Ejecutivo no esté sustentado en análisis técnicos ni financieros. “Pareciera más un capricho del presidente que un análisis serio”, enfatizó, insistiendo en la necesidad de conocer los estudios que respalden una eventual salida del activo.
González subrayó que la producción en el Permian representa aproximadamente el 15% de la producción total de Ecopetrol, con menores emisiones y uso de agua respecto a operaciones locales. Según sus declaraciones, una venta del activo no tendría impacto ambiental relevante, pero sí un efecto fiscal negativo para el país.
Importancia del yacimiento Permian
El yacimiento Permian es una de las cuencas petroleras más productivas del mundo, ubicada entre Texas y Nuevo México, en Estados Unidos. Ecopetrol participa allí desde 2019 junto a Occidental Petroleum (OXY), con una participación del 49%.
En esta zona se utiliza la técnica del fracking, que ha permitido alcanzar altos niveles de rentabilidad y producción, aportando cerca del 14% del EBITDA del segmento de exploración y producción de Ecopetrol, con un margen del 76%, el más alto de la compañía.
Riesgos financieros y advertencia de la Contraloría
González advirtió que una salida del Permian podría representar una pérdida significativa de ingresos para el Estado colombiano y un golpe al valor de la acción de Ecopetrol, especialmente en un contexto de restricción fiscal.
Frente a las alertas de la Contraloría General de la República sobre un posible detrimento patrimonial, el exministro enfatizó que la Junta Directiva de Ecopetrol debe actuar con criterio fiduciario y basar sus decisiones en datos verificables, no en posturas políticas.
Expertos, exfuncionarios y el sindicato USO coinciden en que vender el activo sería un error financiero y estratégico, ya que implicaría perder cerca de 189 millones de barriles equivalentes en reservas y reducir de forma significativa la rentabilidad de la compañía estatal.
El debate sobre el futuro del Permian continúa siendo uno de los temas más polémicos dentro del sector energético colombiano, al reflejar la tensión entre la política ambiental del Gobierno y la necesidad de mantener la sostenibilidad económica de Ecopetrol.
